Una de las cosas más útiles y divertidas para hacer comprensible un proyecto arquitectónico, es crear vistas en perspectiva de su edificio, para tener al menos una idea realista de lo que se va a construir. La perspectiva es una técnica de dibujo muy antigua que ha tenido sus usos desde su creación, aunque no todos sepan cómo dibujar haciendo perspectiva de dos puntos.
Sin embargo, no solo es fundamental en el entorno arquitectónico, sino en el dibujo en general. De hecho, sería imposible pensar en producir un hermoso dibujo o pintura sin considerar los objetos en perspectiva. Hay diferentes tipos de perspectiva que se pueden utilizar en función de la vista que se quiera originar.
Guía para aprender a dibujar perspectivas de dos puntos
Con esta pequeña guía podrás aprender fácilmente a dibujar una perspectiva con dos puntos de fuga, un tipo de perspectiva que suele dar más realismo a un dibujo que una perspectiva central. Aunque parezca complicado, te enseñaremos paso a paso a realizarlo.
En perspectiva, el punto de fuga es un punto hacia el que convergen las líneas paralelas. En nuestro caso hay dos puntos de fuga, y este tipo de perspectiva también se llama perspectiva accidental.
Los puntos de fuga se sitúan en las caras horizontales de la hoja de papel y tienen una importancia fundamental para dar dirección al dibujo. Pongamos manos a la obra y veamos cómo dibujar haciendo perspectiva de dos puntos de fuga en unos sencillos pasos.
El equipo necesario para comenzar
- Una hoja de papel (tamaño opcional, se recomienda A4 o superior).
- Un lápiz (o más bien un lápiz H y un lápiz B).
- Regla y/o escuadra.
- Borrador.
- Lápices de colores (en el caso de los dibujos en color).
La línea del horizonte
En primer lugar, hay que trazar la línea del horizonte, que debe ser perfectamente horizontal, estar situada en la parte superior de la hoja y abarcar toda su longitud. Los dos extremos de la recta se denominan puntos de fuga llamados LVP (el izquierdo) y RVP (el derecho) o simplemente punto 1 y punto 2.
Estos dos puntos son importantes, ya que de ellos se deriva el nombre de «perspectiva de dos puntos». A continuación, traza una línea vertical en el centro de la hoja, cruzando la línea horizontal que acabas de dibujar. Esta línea es muy útil para los menos experimentados, porque puede utilizarse para crear el borde del edificio perfectamente en el centro de la hoja con un margen de error mínimo.
Dibujar el borde de la figura
Ahora tenemos que dibujar el borde de la figura, por ejemplo, de un edificio, que es el borde más cercano al espectador y siempre es vertical. En este caso será útil apoyarse en la línea vertical dibujada anteriormente, por lo que es aconsejable dibujarla en el centro de la hoja.
Dibuja una línea paralela a la vertical y llama a los extremos C y D que determinarán la altura del edificio. Para empezar a producir un verdadero palacio, tenemos que dibujar estos dos puntos. Para ello, solo necesitarás dibujar fracciones que unan los puntos C y D, con los puntos 1 y 2.
Tendremos entonces 4 líneas y la parte de la hoja entre las dos líneas de la derecha y las dos de la izquierda serán las extensiones de las paredes.
La tridimensionalidad del dibujo
Ahora debe «cortar» las extensiones de las paredes que no pertenecen al edificio porque son demasiado largas. Para ello, hay que dibujar dos segmentos verticales, uno por cada pared, que son necesarios para unir las líneas de fuga de los puntos del primer vértice.
Con esta operación has dibujado las dos primeras paredes. Si lo deseas, puedes sombrear un lado del edificio para darle tridimensionalidad. El tejado, si se desea o se requiere, sólo será visible si el vértice inicial del edificio se ha dibujado completamente por debajo de la línea del horizonte.
Dibujar detalles con la misma técnica
Para dibujar el techo, basta con dibujar los puntos superiores de los dos vértices secundarios. El techo será la parte de la hoja entre las dos líneas superiores de las paredes y las dos últimas líneas dibujadas.
Para dibujar puertas y ventanas hay que utilizar la misma técnica que para el edificio: así que dibuja una línea vertical que será un lado de la puerta o ventana, y envía los dos extremos a un único punto de fuga (si quieres dibujar la ventana en la pared izquierda del edificio, envía los dos extremos al punto de fuga izquierdo).
Por último, una las dos líneas obtenidas con una línea vertical («recorte» de la extensión de la ventana/puerta).
Recalcular y pintar
Añade el número de puertas y ventanas que requiera tu diseño, y elimina las líneas que van hacia los puntos de fuga y que no pertenecen a la figura. Recalca con un lápiz B todas las líneas del edificio y sus elementos y, si quieres, colorea el dibujo con ceras, tizas o lápices.
El dibujo estará entonces completo, pero si quieres añadir otros elementos, como pasos de peatones u otros pequeños adornos y detalles, utiliza la misma técnica: envía las líneas a los puntos de fuga y ya está. También puedes emplear esta técnica para dibujar más de un edificio, siempre teniendo en cuenta las reglas de la perspectiva.
Aprender a dibujar en perspectiva no es fácil, sobre todo entender el proceso inicial, pero una vez que lo domines, será bastante sencillo y mecánico producir bellas perspectivas. También hay muchos libros de geometría descriptiva de los que se puede echar mano para aprender bien la técnica, aunque estén descritos de forma no precisamente sencilla. Sin embargo, si es usted es principiante, puede aprovechar los consejos de esta guía, que sin duda le serán útiles.
Para finalizar considera los consejos de cómo dibujar haciendo perspectiva de dos puntos
No lo olvides nunca que las líneas que no pertenecen a la figura, sino que solo son útiles para su construcción, deben borrarse después de terminar el dibujo. Por eso es mejor dibujarlas ligeramente con un lápiz en H para facilitar su borrado.